Por amor a la música: una charla con los músicos de Smartmatic – Parte I

Heider García: “Mi vida es una colección de bandas sonoras” 

Una película es, o debería ser, más como la música que como la ficción. Debería ser una progresión de emociones y sentimientos. El tema, lo que está tras la emoción, el significado; todo eso viene después.

 —Stanley Kubrick 

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Smartmatic es una de esas compañías donde los músicos y los amantes de la música se encuentran bien representados. Comenzando con el CEO, la tecnología y la música están mezcladas con el ADN de muchos de los que trabajan aquí. Algunos de ellos han decidido compartir sus opiniones sobre cómo la música es un complemento extraordinario de sus vidas, acompañando o compitiendo con sus trabajos. 

Uno de ellos es Heider García, Solution Manager en Smartmatic. Comprender lo que significa la música para Heider es similar a la producción de una película de Hollywood (o quizás una más indie); desde la preproducción hasta los toques finales a la obra maestra antes de ser exhibida, el camino es una mezcla de pasión, un compromiso permanente, sorpresas y lecciones aprendidas al perder y recobrar la fe en el proceso, pero a fin de cuentas amando la posibilidad de tocar el alma de algunas personas. 

La música es una parte fundamental de su vida, y “ha sido vital para el desarrollo de mi personalidad, siempre es un reflejo de mi estado de ánimo y desencadena memorias”, mientras afirma que se “podría decir que mi vida es una colección de bandas sonoras”. 

Heider se conecta con la música tocando el bajo, lo que ha hecho desde los 19 años. “No he logrado tocarlo continuamente”, porque su carga de trabajo lo ha forzado a abandonar el instrumento por varios años. Pero su matrimonio le trajo beneficios inesperados: “fue luego de casarme que volví a tocar, porque mi esposa se dio cuenta cuánto me hacía falta ¡y me sorprendió el día de mi cumpleaños con un bajo excelente!”. 

Corazón de músico, vida de gerente 

Heider describe las ambigüedades de mezclar su pasión con su trabajo usando palabras sencillas: “Supongo que hay una conexión entre mi trabajo y mi música. Los dos mundos se encuentran cuando tengo un toque con mis amigos y compañeros de trabajo, pero esto siempre sucede en una atmósfera relajada e informal. Prefiero mantener mi música como algo bastante personal”. 

Por una parte, la música le ofrece un proceso de aprendizaje doble. La oportunidad de tocar en vivo lo ha ayudado a vencer su miedo escénico, por ejemplo. “A veces la gente me pregunta si me pongo nervioso al dar una presentación, una charla, una conferencia, o al hablar en un comité. Creo de verdad que la respuesta es con frecuencia “no, gracias a mi experiencia de tocar en público y a lo que la música me ha enseñado”. 

Por otra parte, hay complicaciones al tratar de balancear los dos mundos. “Es una lástima, pero la verdad es que a veces el exceso de trabajo es el motivo por el cual no practico tanto como me gustaría. Por ejemplo, ahora estoy en Manila escribiendo esto y no he tocado el bajo en más de un mes”. Sin embargo, aquellos que quieren tocar un instrumento, buscan la manera de hacerlo posible. Hoy en día Heider todavía ensaya y toca. “Formo parte de una banda con algunos amigos panameños con los que ocasionalmente toco en bares y fiestas. Nos reunimos todos los domingos por un par de horas para ensayar y armar el repertorio. Esas dos horas son mi escape semanal de todo, incluso del trabajo”. 

Hay muchos otros músicos en Smartmatic, lo que de alguna forma les facilita relacionarse entre ellos y hacer planes para compartir su hobby. “Algunos de nosotros hemos hablado incluso de formar una banda en Panamá, quizás para tocar en eventos sociales o reuniones de la compañía. Pero como dije, entre nuestros intinerarios, calendarios de viaje y mudanzas alrededor del mundo, han pasado 2 años y no hemos materializado este sueño”. Él sigue intentándolo y recuerda que según algunos ¡los ingenieros de software son excelentes músicos!